VIAJE a CALIFORNIA - NEVADA
"FarWest mesacho corto 2006"
(by edmenahi)
Viernes 12-5-06: Six Flags Magic
Mountain. Inauguración de TATSU. A la hora en que nos despertamos
Modegod y Nimue deben estar ya en pleno vuelo de regreso a la otra costa, para
después coger otro avión camino de España. También es el último día para el
resto de alicantinos, por lo que ellos ya se llevan las maletas a SFMM. Los
madrileños tenemos un día más de estancia. Así que nos levantamos y bajamos a
desayunar todo lo tranquilamente que se puede hacer en un “día de trabajo”.
Mientras nos metemos entre pecho y espalda un montón de tostadas y esos
buenísimos rollitos de canela que quitan el sentido, vemos las noticias de una
cadena nacional. A todos nos llama la atención que la principal sea la
inmigración ilegal a través de la frontera de México. Sin embargo por ningún
lado se ve noticia alguna sobre los diarios atentados en Irak, circunstancia de
la que en España nos bombardean a diario en todos los telediarios. Está claro
que la información se maneja al antojo del país donde se emita.
Quedamos en la puerta del hotel y nos ponemos en marcha. La interestatal está
como todos los días, de bote en bote, pero de todos modos tenemos tiempo de
sobra para llegar al parque. Además, aprovechamos el “car pool” para ir un poco
más rápido, cosa que no siempre se cumple, pues depende siempre del vehículo que
tengas delante.
El día, como todos los anteriores, sale con es espesa neblina que por
experiencia sabemos que según se acerca el mediodía desaparece por completo,
dando paso a un sol de los que pica para la época en que estamos… claro,
comparándolo con España.
Llegamos al parque y vemos para nuestro desconsuelo que hay un montón de gente
más que en la ocasión anterior que estuvimos, pero eso tampoco nos preocupa,
pues la única y principal razón de estar hoy en el parque es poder estrenar
Tatsu. Aparcamos y nos vamos dando el paseito hasta el control de entrada. Como
ya dije el otro día, nada comparado con lo de otros parques. Aquí tienes que
vaciarte los bolsillos por completo y abrir mochilas, bolsos o cualquier cosa
que lleves. Después pasar por el arco detector de metales y aún así, si pita, te
pasan el de mano para localizar lo que sea que lleves. Aún no está abierto el
parque y vamos contando los minutos que nos quedan para poder entrar mientras
vemos que más y más niños van llegando en grandes grupos.
Minutos antes de abrir comienza un espectáculo con los personajes de Warner que
van haciendo la cuenta atrás. Explotan varios cañones de papel y…
… comienza la carrera. Para otros, pues nosotros teníamos que ir a una oficina
para acreditarnos como “prensa” en la inauguración oficial de Tatsu. Tras ir de
aquí para allá por varias oficinas de dentro del parque, nos dicen que las
acreditaciones las entregan en el exterior del parque. Así que salimos de nuevo
y vemos que en una simple mesa de camping tenían una caja con las pulseras que
acreditaban para poder acceder a Tatsu. Nos identificamos y nos entregan las
nueve sin problemas.
* “Nótese el friki de detrás que me recuerda a aquél que salía en el programa
del Arús”
En lo que hacíamos todo esto, el resto del grupo comprobaba cómo la subida hacia
Tatsu estaba cortada por un CM que impedía el paso a todo aquél que no llevase
puesta la pulserita. Así que allí mismo nos la colocamos y entramos a la zona
“acotada”. Nada más llegar a la plaza que hay junto a la nueva atracción vemos
que hay un montón de cámaras y periodistas (algunos de periódicos de colegios)
entrevistando a una persona. Casi se me descuelga la boca cuando veo que es Paul
Ruben, el de Park World .... ¡con la de vídeos que he visto de él!
Para los que no le conozcan, decirles que es un auténtico crack en esto de las
coasters. Su record deja incluso al Puto Amo convertido en “sopa de sobre”. Creo
recordar que posteriormente nos dijo que llevaba más de 600 coasters. Eso sí,
cuando le dijimos de dónde éramos y la cantidad de coasters que llevábamos
algunos (Cop fue el que habló con él), se quedó muy sorprendido.
Allí estaba también Connie, con quien habíamos hecho todas las gestiones para
que nos facilitasen los pases de prensa para la inauguración oficial de Tatsu.
Todo comenzó cuando compramos los pases de temporada a través de Internet y nos
pusimos en contacto con ella por otra razón. Cuando nos identificamos como la
Asociación de Usuarios de Parques Temáticos y le contamos en qué consistía
nuestro viaje y que teníamos conocimiento de los actos previos a la apertura de
la nueva atracción nos dio todo tipo de facilidades para acceder a ellos. El
media-day… pues como que pasamos, pues consistía en casi acampar en la puerta
del parque desde las 5 de la mañana y sin garantías de probar Tatsu. Sin
embargo, aprovechamos la de prensa, jugándonos todo a una carta. Afortunadamente
salió bien, pues nos podría haber pasado como a uno que se quedó mirando Dodompa…
o para no ir tan lejos, como alguno de PKTK que está a mi lado en la foto y se
quedó en este mismo parque viendo X desde lejos
Y si Connie es la que está a mi otro lado… solo queda uno (aunque en la
foto hay otros que les pasó lo mismo ). La foto de grupo del día, ya sin
Modegod y Nimue, no podía ser en otro sitio.
Menos mal que se nos ocurrió ir a Tatsu antes de la hora que se suponía que era
la de inicio del acto. Porque nos habían citado para las 12 de la mañana y en un
principio habíamos pensado dar una vuelta por el parque, como no, intentando
hacernos X una vez más. El caso es que cuando estábamos haciéndonos fotos junto
a la entrada de la atracción vemos que empiezan a dar acceso a todos los
presentes (que éramos muy pocos, por cierto).
Sin dudarlo un instante nos vamos hacia la estación de embarque. Aún se nota que
está todo recién pintado o que incluso les ha pillado el toro, pues se nota
falta de jardinería por muchos sitios, aunque SFMM no es un parque temático, con
lo que tampoco creo que cambie mucho la ambientación con el tiempo. Hay varias
zonas de colas en la parte baja y unas escaleras hasta el acceso a la atracción
que supongo que a estas alturas estarán todos los días hasta los topes. Pero hoy
no es el caso, así que subimos rápidamente y nos preparamos para hacer primera
fila. La atracción está con los técnicos en la misma estación, así que hay que
aprovechar no sea que la paren y nos quedemos con las ganas.
Y por circunstancias físicos personales, mientras estamos haciendo la cola
Circe nos dice que tiene prisa por subir… y sobre todo por bajar. Así que en uno
de los carros que suben en primera fila vemos que sólo van tres personas y sin
dudarlo se ofrece para completar la fila, convirtiéndose en EXCLUSIVA
en la primera persona de España, e incluso me atrevería a decir de Europa,
que sube en Tatsu. Y como no, tenía que ser de PKTK.
El resto de adizos esperamos impacientes nuestro turno…
… pero otro del equipo A nos toma la delantera, además con motivos ya conocidos
por el resto, grabar el primer on-ride de Tatsu no realizado con consentimiento
del parque.
Tras los dos pioneros subimos Fly y yo mismo…
… con el extra añadido que siempre tiene subir en cualquier coaster con Fly.
Sobre todo si la coaster es de las buenas. Algo parecido pero en plan faltoso
sólo lo he vivido con Docavo, pero ni punto de comparación. Esos pedazo gritos
sacados de vete a saber dónde (porque me extraña que tenga tantos pulmones)
unidos al excelente recorrido de la fliyng, son para quedarse uno transpuesto
después de la experiencia. Como en casi todas las de la marca (las stand-up no,
porque en sí mismas son insulsas), ver la sección de vía y reconocer a B&M como
el fabricante de la misma, es ya una garantía de suavidad. Como así fue. Pero el
recorrido es una verdadera maravilla. Al contrario de lo que estamos
acostumbrados, con los mayores looping y/o inversiones tras el first drop, en
Tatsu se reserva lo mejor para el final. Recuerdo que en Superman de Six Flags
Great América, éste mismo elemento me hacía sentir que se me salían los ojos de
la presión en la cabeza, pero se producía al final del looping. Sin embargo en
Tatsu es progresivo y la sensación es de casi perder el conocimiento. Se nota
una presión en la cabeza bestial, y encima es gigantesco el recorrido, con lo
que la sensación dura lo que casi se hace una eternidad. Además, el hecho de que
la entrada/salida del looping sea desde arriba lo hacen aún más intenso.
Por último suben Acius, Kap y Halfing en primera fila en el mismo carro del que
nos bajamos nosotros, haciéndolo Hansolo y Marcopolo en segunda fila. Se nota
que es una apertura para prensa, pues nos permiten permanecer en la estación
para hacernos fotos o incluso quedarnos en la escalera hasta que regresan. Sin
dudarlo, volvemos de nuevo a la estación de embarque para probar en otras filas.
Si la sensación en el loop es fuerte en primera fila, en la última es casi una
animalada. No apto para principiantes
Como no sabemos a ciencia cierta si seguirá abierta mucho tiempo, aprovechamos
para hacer algunos viajes más en diferentes filas. Pero llegan las 12 de la
mañana y nos dicen que cierran. Menos mal que habíamos adelantado la hora de
llegada a Tatsu, pues si lo hubiésemos hecho a la hora que en principio nos
habían fijado, nos habríamos quedado en tierra, nunca mejor dicho
Bajamos de Tatsu y volvimos a la plaza donde habíamos visto a Paul Ruben, cuando
vemos que aún sigue allí, pero con menos gente alrededor. Así que Cop le pide
que se haga una foto con nosotros, a lo que accede gustosamente.
Fue en este momento cuando se fijó en nuestras camisetas y nos preguntó de dónde
éramos e intercambiaron curriculums. Creo que a Paul le quedó claro que sus más
de 600 coasters por todo el mundo son una auténtica pasada no al alcance de
muchos, pero que unas personas de un país donde no hay cultura alguna de parques
y éstos se pueden contar con los dedos de dos manos, tengan más de 300 en su
haber es algo también difícil de conseguir. Nos prometió que visitaría nuestra
web. Como nosotros le prometimos que pondríamos en ella la foto con él Si en
esto de las coaster hay un rey, sin duda alguna es Paul Ruben.
Pero aún teníamos una sorpresa inesperada. También estaba incluida la comida.
Así que nos vamos derechos hacia un fast-food sito en la misma plaza, donde nos
dan a elegir entre “turkey” (jamón de pavo, vamos) o vegetal. La bebida era
gratis y a mansalva. Tenían un par de neveras donde podías coger todas las latas
que quisieras.
No era gran cosa comparado con lo que habíamos comido en nuestra visita anterior
al parque, pero siendo gratis… pues eso, unos dólares que nos ahorramos ese día
Cuando terminamos de comer vemos que siguen lanzando carros con gente, así que
supongo que algunos llegarían con el horario que nos habían dicho a nosotros y
ante las protestas les permitieron subir. Volvimos de nuevo y compramos algo de
merchandising en la tienda que hay debajo de la estación de embarque.
Como no todo en el parque era Tatsu y a los alicantinos tampoco les quedaba
mucho tiempo, seguimos dando una vuelta por el parque. Cuando bajamos la montaña
hacia el otro lado vemos que Deja Vu hoy sí está en funcionamiento, al igual que
Psyclone. Marcopolo y yo nos vamos derechos hacia Psyclone.
Desde fuera no tiene la pinta de lo que es “por dentro”. Para empezar en la
misma estación la cosa no pinta bien, cosa que corroboramos en el momento en que
subimos. Ya solo en el recorrido previo al lift los meneos son considerables.
Pero nada comparado con lo que es la primera caída… en ese momento nos pusimos a
gritar “me se hace laaaaaaaaaaaaargooooooo”. Horrible, no puedo decir otra cosa.
Mira que he subido en woodens, mira que muchas de ellas son leñeras. Pero en mi
vida había subido a una tan realmente mala, tanto de recorrido como de estado de
conservación. Vamos, una de esas que recomiendas a los enemigos, como diría
Maverick “para que se jodan”
Con una paliza brutal en el cuerpo nos vamos los dos hacia Deja Vu, la prima
hermana de Stunt Fall de Warner Madrid. No hay mucha gente en la cola, así que
llegamos a la estación de embarque enseguida…. Pero en cuanto estamos arriba se
estropea al no llegar al final del recorrido en la estación, con lo que la
plataforma no sube. El operario dice por megafonía que queda fuera de servicio y
no sabe cuánto tardarán en volver a ponerla en funcionamiento. Halfing, Kap y
Acius que venían de Psyclone dicen que no se esperan y se salen de la cola al
igual que bastante gente que se marcha, así que Marco y yo aprovechamos para
ponernos en la última fila. Vemos llegar a un técnico que reinicia la atracción
y comentamos que ahora tendremos que esperar a que lancen los carros de prueba…
pues no. En el momento que el técnico le dijo al operador que ya iba, abrió las
puertas y nos lanzó. Ambos lo flipamos pues a diferencia de Stunt Fall, Deja Vu
es muy suave, nada de brusquedades. ¿Cómo puede ser? Sencillo. Mantenimiento, no
hay más.
A la que salimos, le comentamos al resto del equipo M lo bien que va en
comparación con lo que tenemos en Madrid y nos encontramos que estaban
preparando un cartel para Migul con su frase favorita, ya que le tiene especial
“cariño” a la GIB
Continuando con la vuelta al parque vemos que sigue cerrado el recinto del
espectáculo Batman Begins, con lo que quedan agotadas las posibilidades de poder
compararlo con el de Warner Madrid.
Curioso:
¿Hommer Simpson en un Six Flags? Cuestión de pagar derechos, imagino.
También es curioso, como en otros muchos parques en EEUU, la cantidad de
atracciones de pago que hay dentro de los parques. En SFMM, además de la Sky
Coaster que hay en casi todos, hay karts, paredes para practicar escalada, camas
elásticas…
Aunque quizá lo que más se agradece es:
bueno, no todos pensábamos lo mismo ¿verdad Marcopolo? Quizás parezca
una tontería, pero el hecho de tener que ir a un guetto para poder fumarse un
cigarro creo que consigue que los mismos fumadores lo hagan menos. Con lo grande
y tortuoso que es SFMM, encontrar una zona lleva su tiempo. Cosa de la que
nosotros no solemos ir muy sobrados
Casi terminando de dar la vuelta, vimos que hacían una variante “húmeda” del
espectáculo de los Looney Tunes de Warner Madrid.
Una vez que estábamos próximos a la salida, nos despedimos del equipo A, que
tenía que salir esa misma noche hacia España. Así que nos despedimos y lo
dejamos plasmado para los restos
Después de despedirnos nos fuimos hacia The Revolution, la coaster que el día de
nuestra anterior visita estaba cerrada porque tenían una sección de vía
desmontada para poder terminar Tatsu. Es de las pocas coasters del mundo con un
looping de 360º, aunque posteriormente comprobamos que quizá sea lo único
atractivo de esta vieja coaster. Porque el recorrido en sí… de merderol del ocho
Al mismo tiempo, los alicantinos se habían ido al paseo de la fama de Los
Angeles para ver las famosas losas donde estampan las manos y pies los artistas
más consagrados. Hoy sí que no había problemas para hacerlo. Y como no, Fly no
podía dejar pasar la foto con la lápida de su ídolo:
Vaya manos!!! Lo más parecidas a las de Shrek que he visto nunca
Y aquí las de los de La Guerra de las Galaxias…
y Hansolo, el de la web:
y el de verdad:
La avenida está siempre llena de personas disfrazadas al estilo de lo que vimos
en la calle Fremont de Las Vegas, quienes sacan algunos dólares posando con
quienes se quieran hacer fotos con ellos:
Más al norte, los del equipo M nos disponíamos a efectuar las últimas y más
grandes compras y nos despedimos del parque.
A la que ya estábamos casi fuera del parque, a Halfing se le ocurrió que nos
podíamos hacer una foto con X al fondo como despedida definitiva (bueno, por
este viaje sí) de SFMM. Así que preparó la cámara en lo alto de la Sienna
Y tras varios intentos, conseguimos una en la que se veía un trozo del carro de
X al fondo
Para estar calculado sobre la marcha, demasiado bien que consiguiéramos este
resultado
Por su parte, los alicantinos ya estaban camino del aeropuerto, pudiendo éstos
hacer las únicas fotos auténticas del cartel de la montaña más o menos decentes.
Un detalle que aprendí de Cop de otros viajes. Ponemos el cuentakilómetros
parcial a cero al inicio de los viajes y así sabemos cuántos hemos recorrido en
todo el viaje cuando dejamos los coches definitivamente.
Ale, que alguno saque la calculadora y lo pase a kilómetros
Y esta otra supongo que la hizo Cop con recochineo por nuestro “affaire” de la
gasolina del regreso de Las Vegas. Bien calculado… y exprimido. Pues sólo le
quedaba gasolina para 5 kilómetros según el ordenador del coche:
Lo que el equipo A no sabía es que nuevamente nos encontrábamos temblando de
gasolina. Y para rematar, de vuelta a Los Angeles nos encontramos con un atasco
de los de verdad. Previamente habíamos parado en un outlet para hacer algunas
compras más. Ponemos la iPaq para que nos diga la gasolinera más cercana y
resulta que la tenemos bastante lejos. Así que a la que llegamos hacemos el
cálculo definitivo y repostamos 20 dólares más. Halfing plantea ir al centro de
Los Angeles para ver las partes del paseo de la fama que nos quedamos sin ver el
día anterior por culpa del estreno de Poseidon. Pero no hay muchas ganas de
meterse de nuevo en aquel asqueroso lugar, así que nos vamos hacia un
observatorio desde donde se dice están las mejores vistas de la ciudad y del
cartel de marras. Menos mal que nos hicimos la foto en USH con el cartel de
mentira, pues lo único que se veía cuando llegamos al observatorio era esto y
eso metiendo Acius zoom a tope:
La “peineta” me la colocó Halfing, por la de veces que repetí “lo bien que se
veía el cartel”
Lo de “las mejores vistas de la ciudad”, se ve que tampoco hoy era el día:
La neblina de por las mañanas empezaba a dejarse ver por todos lados. Lo más
flipante de subir al observatorio fue que la carretera era clavada a un
escenario del GTA San Andreas. Daban ganas de ponerse a correr, aunque no era
plan de fastidiar el viaje el último día, aunque para recordármelo estaban
éstos:
Así que, seriedad al volante
De vuelta al hotel pasamos por delante de Universal City, rememorando las
experiencias del día anterior.
¡Qué ganas de volver! Y eso que aún no nos habíamos ido
Llegamos al hotel y nos dispusimos a recoger las maletas. Acius y yo habíamos
comentado en días anteriores que en lugar de meter en el maletón de los regalos
éstos, meteríamos la ropa sucia y en las maletas los regalos, dado que el cierre
por cremalleras del bolsón no nos infundía mucha confianza y mejor perder unos
calcetines sudados (bueno, yo no, que los tiraba todos los días) que no las
Heelys de Cyborg, por ejemplo. Así que se lo decimos a Halfing y Kap, pero se
niegan a meter sus peluches con mis calzoncillos, por lo que finalmente llegamos
al acuerdo de que mi ropa sucia la llevo en mis maletas y ellos me llevan la
Heelys en las suyas.
Cuando teníamos todo ya preparado, con las maletas diciendo “estoy que
reviento”, cenamos y a la cama. Última noche del “Mesachocorto PKTK American
Tour”. |